CARTA A CARLES FRANCINO "LA VENTANA" (CADENA SER)

Manuel Sarrias: “¿Ben Hur para cristianos fundamentalistas?"

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N.d.R: Reproducimos a continuación la carta que el autor escribió al director del programa "La Ventana" (Cadena SER), con motivo de unos comentarios vertidos por el crítico de cine Yago García, a propósito del estreno del remake de Ben Hur, al que calificaba de "cine para evangélicos fundamentalistas". Al pie de la misma reproducimos la respuesta de dicho periodista, disculpándose y explicando el origen de su información. (Ver también nuestro EDITORIAL, en el que comentamos otros incidentes recientes similares).

20160909-1a

(MANUEL SARRIAS, 09/09/2016) |

Sr. Carles Francino
Director de LA VENTANA
Cadena Ser
Gran Vía, 32-planta 7ª
28013 – MADRID

Valencia, 7 de septiembre de 2016

Estimado Sr. Francino:

Soy asiduo oyente de la SER desde hace muchos años. Ya antes de las 7 con Pepa Bueno y normalmente a partir de las diez y media de la noche  la tertulia de Hora 25 con Angels Barceló, así como Hora 14 de José Antonio Marcos y La Ventana, especialmente el tramo que va desde su entradilla-portada hasta las cinco de la tarde.  El fin de semana de Ester Bazán la encuentro también de muy buena y rigurosa información.  Cuando me es posible, escucho primera hora de “A vivir que son dos días”. Los breves comentarios de Iñaki Gabilondo suelo encontrarlos plenamente acertados (creo no ser el único que le echa de menos).  ¡Ah! ¡Genial la polémica de ayer tarde con “Arriba España!

Soy un jubilado; de 1989 a 2014 he sido Secretario General de la Unión Evangélica Bautista de España –UEBE (ahora lo soy en calidad de “Emérito”) y Vicepresidente de la Federación de Entidades Religiosas Evangélicas de España-FEREDE, firmante en 1992 de los Acuerdos con el Estado Español y las iglesias Evangélicas (ese mismo año también se firmaron con los judíos y los musulmanes). Aunque estas líneas se las escribo a nivel estrictamente personal.

El pasado viernes día 2 de septiembre estaba escuchando la Ventana y tras su comentario inicial (haciendo referencia a “niñolandia” y los 4 niños simbólicos), usted se refirió al estreno del remake de Ben Hur y que el tema de la tarde sería “una de Romanos”, haciendo mención a películas  destacadas en este género, como La Caída del Imperio Romano, Cleopatra, Espartaco, Gladiator, etc…. Estaba como invitada una actriz llamada Elvira Mínguez y también se invitó a un crítico de Cinemanía, Yago García, a comentar Ben Hur, entre las del género citado.  No salí de mi asombro cuando, en un momento, dicho crítico dijo que este remake de Ben Hur se había hecho por una productora de películas basadas en la fe, dirigida especialmente a  “cristianos evangélicos” que son las permitidas por las características de su religión,  a lo que la invitada Elvira asentía con “ahora lo comprendo un poco más”, mientras que usted guardaba un discreto silencio.  Y Yago García volvía a insistir en que este tipo de películas era para “cristianos fundamentalistas o cristianos evangélicos”, como otra reciente “Desaparecido” (en realidad se refería a Risen, Resucitado). Y así quedó la cosa, siguiendo con el tema del género “de romanos”. Conectar con el 902 146060 no resulta tarea fácil.

Ignoro si usted conoce a los evangélicos, particularmente a los evangélicos (o protestantes) españoles.  Lo dudo, porque si fuera así habría salido al paso de las afirmaciones de Yago García. Ni la mayoría de evangélicos de Estados Unidos ni de otros países, y desde luego no los de España, encajarían en los términos expresados por el crítico de cine.  Al escucharlo tuve una mezcla de indignación y tristeza y me sentí muy molesto preguntándome cómo es posible que una información así se deje caer en un medio como LA SER y concretamente en LA VENTANA.

"¿Será posible que todavía se nos confunda a tantos millones de evangélicos en el mundo, y decenas de miles en España, que huimos de los extremismos, que amamos la libertad, la democracia, la igualdad de género incluso en el ministerio cristiano, y que nos oponemos a todo tipo de dictadura, corrupción, esclavitud o lavado de cerebro? "

No soy de los que ven fantasmas ni voy por el mundo con victimismo, pero resulta fuera de lugar y de falta de rigor colocar a los todos los “cristianos evangélicos” en el plano mencionado.  Naturalmente que en todas partes cuecen habas y hay sectores para todos los gustos en todas las iglesias cristianas, incluidos los fundamentalistas (sobre todo en las iglesias y religiones jerarquizadas y de gobierno piramidal) y liberales, y en los medios de comunicación o los partidos políticos. Incluso en críticos de cine.  Al generalizar se da a entender como si los cristianos evangélicos  fuéramos seres de absoluta cerrazón, fundamentalistas a cal y canto, medievales, seguidores ciegos de los telepredicadores, de los que dicen que el mundo se creó en 6 días de 24 horas, que nos negamos a llevar a nuestros hijos a colegios públicos o que, como sectas cerradas por nuestras cúpulas  se nos prohíba ir al cine a no ser que sea para ver  las únicas películas autorizadas,  sin ninguna capacidad de decisión, ni la más mínima  libertad, como menores de edad que necesitan ser tutelados por sus jefes espirituales. Me recuerda las Semanas Santas de mi niñez y primera juventud cuando por decreto no se podía cantar, ni reír y en los cines –cerrados en Viernes Santo-  solamente proyectaban Quo Vadis, La Túnica Sagrada, Demetrius y los Gladiadores, el Beso de Judas y similares.  Cuando la religión oficial del Estado era Ley y se ejercía un control absoluto de cuerpos y almas. O como cuando te mandaban al calabozo en el servicio militar por no arrodillarte ante imágenes o ser objetor de conciencia. O con la paradoja que para ser español había que ser católico “romano”. ¿Será posible que todavía se nos confunda a tantos millones de evangélicos en el mundo, y decenas de miles en España, que huimos de los extremismos, que amamos la libertad, la democracia, la igualdad de género incluso en el ministerio cristiano, y que nos oponemos a todo tipo de dictadura, corrupción, esclavitud o lavado de cerebro? Olvidando nuestra reciente historia de pagar una alta factura como evangélicos o protestantes españoles por nuestra manifestación de simpatía y esperanza con la II República y la enseñanza libre y laica en los colegios públicos, de acuerdo a nuestras convicciones de separación Iglesia-Estado, de absoluta libertad religiosa y de conciencia, y de acción social y humanitaria. Y que tengamos un gran amor a la libertad, empezando por la libertad individual, lo que puede tener sus ventajas e inconvenientes, pero entendiendo que la libertad debe ser prioritaria en los órdenes de la vida.    ¿Será posible que sigan confundiéndonos a veces con otros grupos que nada tienen que ver con nosotros? Lamentablemente, algunos medios de comunicación nos tratan, sin conocernos, como si fuéramos cuadriculados y muy cortitos, anclados en una burbuja irreal.

No soy amigo de aclaraciones o rectificaciones, pero a veces hay que hacerlo. Hace algún tiempo, en el programa de la SER, Hora 25, que dirige Angels Barceló, uno de los habituales tertulianos (persona por otra parte bien preparada, que no voy a citar el nombre), hablando del rigor en el control financiero de Ángela Merkel lo justificaba por sus influencias luteranas, recordando que Martin Lutero hacía énfasis en la “salvación por las obras” (sic)) y por ello no era de extrañar la posición de la canciller alemana. En realidad era todo lo contrario, la doctrina protestante de la justificación por la fe y las obras como consecuencia de ello. O que hace un par de agostos, en la Ventana del verano, el, por otra parte, excelente corresponsal de la Ser en Italia, Joan Solés, ante un escrito mío, me llamó y se disculpó (gesto que le honra y que no tiene todo el mundo) por haber expresado la opinión de alguien, sin matizar, que el terrible asesinato que se había cometido en Noruega con más de 70 víctimas jóvenes, era debido al carácter extremista de la religión protestante mayoritaria en aquel país. ¡En Noruega! En el programa siguiente hubo una clarificación.

Confío que la conmemoración del 500º aniversario de la Reforma Protestante que se prepara para 2017 pueda, tal vez por primera vez en cinco siglos en España, remarcar cuáles son las creencias centrales de la fe protestante, así como las notables diferencias de progreso en todos los órdenes entre los países que arraigaron los principios de la Reforma protestante y los que Trento y la Santa Inquisición nos arrebató e impidió con crueldad y en nombre de Dios (¿?)  un nuevo tiempo de libertad, progreso y ética a niveles personales, familiares, laborales, sociales y políticos.  Sin tener Reforma, sufrimos Contrarreforma. Si los valores de la Reforma hubieran arraigado en España claro que hubiéramos tenido problemas, pero hubieran sido otros muy diferentes a los sufridos durante siglos y que todavía nos alcanzan en cierta medida.

Me he tomado la libertad de hacerle llegar estas reflexiones personales, ya que le tengo por persona independiente y rigurosa (aunque no siempre esté de acuerdo con sus opiniones), que busca la veracidad y la calidad en sus programas y muchas veces, con un toque de humor tan necesario y con algún excelente colaborador como Isaías Lafuente.  (Y también intentaré hacerlas llegar a Yago García).  Y sugerirle como Director de La Ventana que alguna vez invite a alguien representativo del protestantismo español, como podría ser el Secretario Ejecutivo de la Federación Protestante (FEREDE), Mariano Blázquez, por ejemplo.  Pienso que ya va siendo hora de saber que hay otras maneras de entender y vivir la fe cristiana como ciudadanos de pleno derecho en un país democrático.   Si coincidimos en alguna ocasión será un placer saludarle personalmente y tomarnos juntos un café.

No sé si le llegarán estas líneas, pero con mi reconocimiento por su trabajo, reciba mis mejores deseos y un cordial saludo,

Manuel Sarrias.

sarrias

P.S. Por cierto, soy aficionado al cine desde muy jovencito y, por curiosidad más que otra cosa, he ido a ver este remake de Ben Hur. Me quedo de todas con la de William Wyler de 1959, una película clásica que, como muchos, he visto varias veces y, desde mi punto de vista, resulta    digna y respetuosa, e interpretada por actores que dan la talla.   La actual, 56 años después, es muy flojita y no se puede evitar la comparación. 

“He tenido un sueño”, decía en una famosa marcha, enumerando situaciones injustas que soñaba debían cambiar.  Nosotros también podemos soñar con él por el cambio de muchas cosas, pero hay que luchar para hacerlo realidad, pues las situaciones no se mejoran ni cambian por sí solas. Hoy sigue en pie su desafío y sus palabras resuenan proféticas con fuerza y enseñanza y damos gracias a Dios por su trayectoria y su testimonio. Hombres como Martin Luther King nos enseñan a ser más justos, más íntegros, más generosos, más honestos, más valientes, más comprometidos con la libertad, el amor cristiano y la paz, tal y como corresponde a seguidores y discípulos de Jesús de Nazaret.

Autor: Manuel Sarrias, pastor y vicepresidente de FEREDE

RESPUESTA DE YAGO GARCÍA (CINEMANÍA / LA SER)

"Aquí Yago García, de Cinemanía. Gracias por su mensaje, y también por la cortesía que demuestra usted en él: se imaginará lo rara que resulta tal amabilidad, de parte de un lector, en los tiempos que corren.

Respondiendo a sus objeciones: como persona interesada por la historia de España, soy consciente de la discriminación que han sufrido los cristianos no católicos en nuestro país, algo que me parece vergonzoso y lamentable. Asimismo, le pido disculpas por aquellas de mis palabras que pudieron parecerle poco respetuosas.

Aun así, los datos sobre Ben-Hur a los que acudí para documentarme indican que la productora de la película, Roma Downey está especializada en financiar 'faith-based films', como se los conoce en EE UU. Y, por mucho que algunos de dichos títulos hayan destacado por su calidad y por su afán ecuménico, como Resucitado (gracias por recordarme el título), la mayor parte de dichos filmes se producen para ser consumidos por un público adscrito a las confesiones más rigurosas del cristianismo evangélico.

De hecho, se especula con que el poco calado que la película ha podido tener en este sector ha sido una de las razones de su fracaso en taquilla. Aquí puede encontrar más información al respecto: http://deadline.com/2016/08/ben-hur-box-office-bomb-faith-based-films-suicide-squad-sausage-party-war-dogs-1201806438/

20160909-1bUn saludo, y gracias de nuevo por su mensaje

Y.G.

 

P.D.: Efectivamente, esta Ben-Hur no le llega a la de William Wyler ni a la suela de las sandalias. Pero es que Wyler era mucho Wyler, y el cine 'de romanos' de aquella época era mucho cine. Como para intentar hacerle un órdago, a estas alturas..."

© 2016. Este artículo puede reproducirse siempre que se haga de forma gratuita y citando expresamente al autor y a ACTUALIDAD EVANGÉLICA. Las opiniones de los autores son estríctamente personales y no representan necesariamente la opinión o la línea editorial de Actualidad Evangélica.

Aquí Yago García, de Cinemanía. Gracias por su mensaje, y también por la cortesía que demuestra usted en él: se imaginará lo rara que resulta tal amabilidad, de parte de un lector, en los tiempos que corren.

Respondiendo a sus objeciones: como persona interesada por la historia de España, soy consciente de la discriminación que han sufrido los cristianos no católicos en nuestro país, algo que me parece vergonzoso y lamentable. Asimismo, le pido disculpas por aquellas de mis palabras que pudieron parecerle poco respetuosas.

Aun así, los datos sobre Ben-Hur a los que acudí para documentarme indican que la productora de la película, Roma Downey está especializada en financiar 'faith-based films', como se los conoce en EE UU. Y, por mucho que algunos de dichos títulos hayan destacado por su calidad y por su afán ecuménico, como Resucitado (gracias por recordarme el título), la mayor parte de dichos filmes se producen para ser consumidos por un público adscrito a las confesiones más rigurosas del cristianismo evangélico. De hecho, se especula con que el poco calado que la película ha podido tener en este sector ha sido una de las razones de su fracaso en taquilla. Aquí puede encontrar más información al respecto: http://deadline.com/2016/08/ben-hur-box-office-bomb-faith-based-films-suicide-squad-sausage-party-war-dogs-1201806438/

Un saludo, y gracias de nuevo por su mensaje

Y.

P.D.: Efectivamente, esta Ben-Hur no le llega a la de William Wyler ni a la suela de las sandalias. Pero es que Wyler era mucho Wyler, y el cine 'de romanos' de aquella época era mucho cine. Como para intentar hacerle un órdago, a estas alturas...