9 de mayo
(SBE/SBU, 05/05/2011) Las Sociedades Bíblicas trabajan en situaciones totalmente plurales. Cada Sociedad Bíblica tiene prioridades y dificultades que le son propias sea que distribuya Escrituras a los inmigrantes, o en las cárceles, visite iglesias u organice eventos magnos. Sin embargo, todas están unidas por su misión, la de poner la Palabra de Dios en el centro de la vida de las personas y de las sociedades en las que se mueven. El fundamento de todo su trabajo y lo que las une por encima de sus propias circunstancias, es la oración.

Cada día del año, en todo momento, hay oraciones que se elevan al cielo a favor de la obra bíblica. Aquellos que trabajamos en las Sociedades Bíblicas oramos juntos regularmente y los amigos y donantes interceden igualmente, bien sea de forma privada como en grupo.

Cada año, el 9 de mayo se convierte en una jornada especialmente consagrada a la oración. Ese día cada una de las 145 Sociedades Bíblicas nacionales que forman la fraternidad de las Sociedades Bíblicas Unidas —y que actúan en más de 200 países y territorios— está en el corazón mismo de las oraciones de acción de gracias y de súplicas por el avance de la obra bíblica.

En cada sociedad bíblica se celebra de forma distinta pero todas están unidas por el poder de la oración y todas, durante 24 horas —gracias a las diferencias horarias— forman un nudo gordiano que bendice el nombre de Dios, que le agradece sus bendiciones y le ruega su dirección y ayuda en un clamor unánime.

Un clamor unánime:

que agradece a Dios los logros de las Sociedades Bíblicas, el avance de las traducciones, las personas que apoyan la obra bíblica, los nuevos edificios recuperados o levantados de nuevo, los proyectos que se llevan a cabo, las personas que tienen un encuentro con Jesucristo gracias a la Palabra de Dios.

que ruega por nuevos recursos, porque se allanen las dificultades, por mayor libertad en los países intolerantes, por personas bien preparadas y con vocación de servicio, por poder producir y distribuir un mayor número de Escrituras que satisfagan la gran demanda mundial.

Fuente: SBU/SBE