NOSÓLOFÚTBOL / por Dani Bores

"Horror vacui"

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(DANIEL BORES, 19/06/2017) | Ha terminado la Liga, la Champions y la Copa del Rey. Este verano no hay ni Eurocopa ni Mundial. Ni siquiera hay Juegos Olímpicos. ¿Qué vas a hacer hasta septiembre?
 
 
El ser humano es como el espacio. No puede estar vacío. Si vaciáramos el aire de un vaso, rápidamente volvería a llenarse de aire nuevo. Somos vasos que se vacían y se llenan casi por inercia filogenética. No sabemos lidiar con el vacío. En la música medieval, y en cualquier expresión del arte en esa época, existía un concepto denominado “horror vacui” (miedo al vacío) que vetaba al artista el uso del silencio en su composición artística. El vacío representaba, y sigue representando, el miedo. Miedo a no tener nada a lo que asirse, a estar suspendido de inseguridades que no le dejan a uno tranquilo. Hay señoras que han llegado a las manos porque al salir de paseo alguien se había sentado en su banco del parque. ¡Después de treinta años sentándose en el mismo sitio!

El vacío representaba, y sigue representando, el miedo. Miedo a no tener nada a lo que asirse, a estar suspendido de inseguridades que no le dejan a uno tranquilo.

Los medios de comunicación deportivos tratan de llenar este vacío (en este caso informativo) con noticias de rumores de compra, rumores de venta, rumores de rumores y más rumores. Podrían aprovechar para hablar de otros deportes, ahora que el fútbol no puede eclipsarlos, pero eso sería demasiado pedir. Es igual, hay que seguir vendiendo periódicos y el fin siempre justifica los medios (de comunicación, digo).

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¿Y tú, querido lector? Seguramente el fútbol no tenga en ti ese poder, pero ahora no hablo de fútbol. Hablo, o mejor dicho escribo, de cualquier cosa que te haya dejado el corazón vacío. ¿Sientes el miedo? ¿Con qué vas a amueblar esa habitación vacía? Antes de que vayas al Ikea más cercano y compres sin pensar, déjame darte un consejo en forma de ilustración. No es mío, es de alguien más sabio.

Juan 14:4. “El que beba de esta agua volverá a tener sed, pero el que beba del agua que yo le daré no tendrá sed jamás, sino que el agua que yo le daré se convertirá en él en una fuente de agua que brota para vida eterna”

¿Tienes sed? ¿Estás harto de beber agua que te deja seco? ¿Estás andando por un desierto y todo cuanto te daba seguridad ha desaparecido? Jesús es la fuente de agua viva. Él quiere llenar tu vida de propósito, porque Él tiene un propósito para tu vida.

Autor: Daniel Bores García | Daniel Bores García (1987), natural de Valladolid, es Doctor en Educación, Licenciado en Ciencias de la Actividad Física y del Deporte y Diplomado en Magisterio de Educación Física. Tiene un Máster en Formación del Profesorado de Educación Secundaria, el Título Profesional de Música y es Experto en Musicoterapia. Es profesor de instituto y profesor asociado en la Universidad Rey Juan Carlos. [Leer más...]

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