REALIDAD AUMENTADA / por Mateus Rodrigues de Mendonça

Vida plena

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El extremeño Francisco Núñez Olivera, el día de su 112º cumpleaños

(MATEUS RODRÍGUES*, 06/04/2018) | Mucho se habla de encontrar el elixir de la eterna juventud, pero es más importante buscar que los años vividos sean realmente de provecho dentro de un propósito.

A principios de 2018 falleció en Badajoz un señor que ostentaba hasta ese momento el título de hombre más longevo del mundo. Francisco Núñez Olivera dio su último aliento a los 113 años, una edad que pocos han podido presumir de alcanzar.

"... la dieta vegana, los zumos detox o el crossfit son algunas de las prácticas que muchas personas identifican como formas eficientes para tener una buena salud y, quizás, alargar su esperanza de vida"

 

Cuando en 2016 el libro Guiness de los Récords le otorgó el título de varón más longevo, los periodistas le hicieron la pregunta que se hace a todos los centenarios: ¿cuál es el secreto para vivir más años? El pacense respondió: “trabajar mucho”. Aquel mismo año una señora italiana de 116 años, identificada a su vez como la mujer más longeva, indicó que su secreto era comer dos huevos crudos cada día.

Mucho se habla de encontrar el elixir de la eterna juventud. En la actualidad, la dieta vegana, los zumos detox o el crossfit son algunas de las prácticas que muchas personas identifican como formas eficientes para tener una buena salud y, quizás, alargar su esperanza de vida.

No sé si el patriarca bíblico Abraham hacía cada mañana algunas series de flexiones, sentadillas o abdominales, ni si su esposa, Sara, bebía un té de jengibre antes de comer; pero una cosa es cierta: según los registros bíblicos ambos vivieron muchos años, ocupando cada uno un puesto en la lista de personas más longevas de todos los tiempos.

Hablando de la Biblia, de sus registros (capítulos 5 y 9 de Génesis) podemos elaborar un top 10 de los hombres más viejos de la historia:

1. Matusalén: 969 años

2. Jared: 962 años

3. Noé: 950 años

4. Adán: 930 años

5. Set: 912 años

6. Cainán: 910 años

7. Enós: 905 años

8. Mahalaleel: 895 años

9. Lamec: 777 años

10. Enoc: 365 años

Curiosamente, el año del Diluvio coincide con la muerte de Matusalén y ocurrió 5 años después de la muerte de Lamec. Previamente a ordenarle a Noé la construcción del Arca, Dios hizo la siguiente afirmación que encontramos en Génesis 6:3: “No contenderá mi espíritu con el hombre para siempre, porque ciertamente él es carne; mas serán sus días 120 años”.

Pasado el Diluvio, Noé fue la única persona que superó los dos siglos. Más adelante la Biblia nos relata una progresiva disminución de la expectativa de vida de los grandes nombres del pasado: los patriarcas Abraham, Isaac y Jacob murieron a los 175, 180 y 147 años, respectivamente, mientras que el hijo de Jacob, José, falleció a los 110.

Casi cinco siglos después, Moisés, el libertador, terminó sus días sumando 120 años, justo al terminar la peregrinación del pueblo por el desierto. Por último, Josué, el conquistador de la Tierra Prometida, también finalizó su vida con 120 años, una vez más ese “tope” mencionado por el Creador.

Da la impresión de que estos números impresionantes eran algo muy común en aquellos tiempos; sin embargo, en una oración que encontramos en el Salmo 90 Moisés afirma que “los días de nuestra edad son setenta años; y si los más robustos son ochenta años, con todo, su fortaleza es molestia y trabajo, porque pronto pasan, y volamos”.

Sobre esa franja de edad, entre los 70 y 80 años, es donde precisamente se sitúa en la actualidad la esperanza de vida en el mundo desarrollado y en vías de desarrollo. En casos excepcionales, como el abuelo de Badajoz, algunas personas consiguen alcanzar el centenario e incluso llegar al número redondo de los 120 años.

"... más que preocuparse por vivir mucho, es más importante buscar que los años vividos sean realmente de provecho dentro de un propósito"

 

Recientemente hemos conmemorado la Semana Santa, en la que se recuerda la muerte del personaje principal de la Biblia, Jesucristo. A diferencia de otros nombres registrados en la Palabra de Dios, Jesus no fue de los que más tiempo vivieron. Al revés: el Mesías fue clavado en la cruz cuando contaba con apenas 33 años.

Durante sus años de ministerio a tiempo completo Jesucristo anunció que su reino, que no era de este mundo, se había acercado, y que era tiempo de pedir perdón y dejar de pecar. El mensaje que predicó no fue bien recibido y sus poco más de tres años de trabajo evangelístico terminaron con su muerte; aunque no quedó en la tumba, como tampoco su legado. Las buenas noticias que transmitió han guiado la vida de millones de personas en toda la historia, que han aprendido a ver la vida como el apóstol Pablo, para quien el vivir era Cristo y el morir ganancia.

Volviendo al top 10 bíblico, hay un caso especial: Enoc. Aunque fue hijo de Jared y padre de Matusalén, respectivamente 3º y 1º en años vividos, “solamente” alcanzó tres siglos y medio. Pero en su breve biografía se resume su vida de la siguiente manera: “Caminó, pues, Enoc con Dios, y desapareció, porque le llevó Dios” (Génesis 5:24).

A todos nos gustaría llegar a viejos, más si es con salud y alegría. Pero más que preocuparse por vivir mucho, es más importante buscar que los años vividos sean realmente de provecho dentro de un propósito. Si esa motivación es caminar con Cristo y vivir por él, sean cuales sean los años, serán de una vida plena.

Autor: Mateus Rodrigues*.

Mateus*Mateus Rodrigues de Mendonça es periodista. Nacido en Brasil, vive en España desde 2003. Desde 2013 forma parte del equipo de Radio Encuentro (Canal de Vida), y también colabora con publicaciones del ámbito protestante de ambos países, entre ellas Actualidad Evangélica.

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