EL PRESIDENTE DEL PAÍS JUSTIFICA EL ARRESTO PORQUE "MAURITANIA ES UN PAÍS ISLÁMICO"

Un joven mauritano encarcelado por “blasfemia contra el profeta”

( 1 Voto )
a / A
Larger Font Smaller Font

El detenido podría enfrentarse a una condena a pena de muerte

20140113-2

EFE/Nuakchot, 13/01/2014) El Presidente mauritano, Mohamed uld Abdel Aziz, proclamó el pasado viernes que su país es un estado "islámico y no laico", ante miles de manifestantes indignados por la reciente aparición en una web de un artículo considerado blasfemo.

"Mauritania no es laica, y el Islam y el profeta Mahoma están por encima de todo: atentar contra la religión del Estado y del pueblo no se puede tolerar de ninguna manera", afirmó Abdel Aziz ante los participantes en una de las mayores manifestaciones de los últimos años.

"Vuestra acción de hoy (la manifestación) es lo mínimo para protestar por este crimen contra nuestra religión sagrada, y os aseguro que yo personalmente y mi Gobierno no ahorraremos ningún esfuerzo para proteger y defender esta religión y sus valores sagrados", dijo Abdel Aziz.

LOS HECHOS

20140113-2aSegún informaron a Efe fuentes judiciales, el fiscal de Nuadibú, ciudad situada a 470 kilómetros al norte de Nuakchot, envió a prisión a Cheij uld Mohamed, de 28 años de edad, tras una denuncia de la Asociación de Imanes de la Mezquita de Nuadibú.

El joven, empleado en la sucursal de una compañía minera en Nuadibú, publicó la semana pasada en varios sitios web de información locales un artículo en el que criticaba al profeta Mahoma y ponía en duda algunas de sus decisiones relativas a la yihad (guerra santa).

El artículo fue inmediatamente retirado de esos sitios web por la presión de las protestas sociales que estallaron en Nuadibú y Nuakchot, en las que los manifestantes reclamaron firmes sanciones contra el autor del artículo.

La familia de Mohamed, que repudió al joven, pidió la puesta en marcha de un tribunal especial que juzgue a los autores de los ataques contra el islam o cualquier religión monoteísta.

Mauritania es un país islámico conservador donde la sharia (ley islámica) está oficialmente en vigor, aunque muchos de sus preceptos, como la ejecución de la pena de muerte, las mutilaciones o las flagelaciones no se aplican.

El presidente añadió que la justicia seguirá su curso pero que "por encima de todo está la religión, a la que no se puede atacar bajo ningún pretexto y así será cualquiera que sea el grado de democracia y de libertades" en el país.

Fuente: EFE