SILBO APACIBLE
Gracias por desacreditarnos
GUILLEM CORREA, 21/02/2013 | El pasado martes 19 de febrero de este año el programa Sense Ficció (de TV3) emitió el capítulo llamado “American Jesus” coproducido por TV3, y dirigido por Aram Garriga.
En este programa, y desde su derecho a la libertad de expresión, se hizo una presentación de la fe evangélica de una parte del protestantismo de Estados Unidos que sencillamente logró desacreditar la fe evangélica.
Entre nosotros la ética protestante no es ni social ni jurídicamente impositiva. La ética protestante es aplicable a aquellas personas que se sienten vinculadas a ella por su propia fe. No imponemos al resto de la sociedad que se comporte como protestantes. Pero también, desde este respecto al otro, entendemos que como protestantes tenemos el derecho a ser respetados y a poder expresar, en igualdad de condiciones, cuáles son nuestras opiniones y versiones de la realidad.
Por esta razón defendemos el derecho de la libertad de expresión incluso, como no podría ser de otra manera, de aquellos que opinan contrariamente a nuestras posiciones.
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Fotograma de "American Jesus" |
El debate, aún no resuelto en nuestro país, que se plantea a la hora de abarcar la cuestión religiosa desde los medios es establecer dónde termina la libertad de expresión y dónde empieza el derecho al respeto por lo sagrado.
La cuestión que se plantea es si en nombre de la libertad de expresión se puede blasfemar contra una religión. Es decir: se puede ofender lo que se considera sagrado por parte de una determinada religión.
Como este debate no se ha producido no tenemos un consenso social sobre qué hacer en estas situaciones. Lo que sí podemos afirmar es que mientras no se llega a una conclusión aceptable, para todas las partes implicadas, entendemos que se deben arbitrar medidas que nos ayuden a ordenar situaciones como la que nos ocupa.
Es por este motivo que, en defensa de la libertad de expresión, hay que ofrecer a los espectadores otra versión de los hechos.
Los responsables del ente público de la televisión de Cataluña deberían poner a disposición de la Comunidad Protestante los mismos medios humanos, técnicos y económicos para poder producir otro programa sobre la fe protestante en los Estados Unidos.
Esta otra versión debería emitir por el mismo programa a fin de dar suficientes elementos a los telespectadores para que lleguen a sus propias conclusiones.
En un contexto como el nuestro, donde todavía la Comunidad Protestante se siente discriminada socialmente y donde la mayoría de nuestros conciudadanos tienen un gran desconocimiento de la fe evangélica y de sus prácticas, un programa como éste, si no es oportunamente contrastado, es un grave atentado contra la libertad de expresión de la Iglesia Protestante y, por extensión, de la Iglesia Cristiana.
La libertad de expresión está en juego cuando sólo hay una sola interpretación de la realidad y se niega a la parte afectada poder ejercer sus derechos.
No se trata del derecho a réplica. Se trata de garantizar la libertad de expresión en igualdad de condiciones.
© 2013. Este artículo puede reproducirse siempre que se haga de forma gratuita y citando expresamente al autor y a ACTUALIDAD EVANGÉLICA como fuente.
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