NOSÓLOFÚTBOL / por Dani Bores
“Ajedrez en la escuela”
Niños compiten en el Campeonato de Ajedrez de Expourense. / N. G.
(DANIEL BORES, 29/01/2015) La Comisión de Educación del Congreso de los Diputados ha decidido, con la aprobación de los principales partidos políticos, pedirle al gobierno la introducción en los centros educativos, fundamentalmente en los primeros cursos de Primaria, un programa denominado “Ajedrez en la escuela”. No ha trascendido aún el contenido exacto de dicho programa, pero al parecer se utilizará el ajedrez como elemento educativo orientado al desarrollo de las competencias lógico-matemáticas y lingüísticas, teniendo también una incidencia notable en aspectos de memoria visual, estructuración del pensamiento, capacidad de concentración y focalización, etc. Además, la aplicación del programa en las aulas tendrá un coste muy bajo, ya que para la práctica del ajedrez tan solo hace falta un tablero y las piezas.
Desde sus orígenes, que se remontan a la India de los primeros siglos, el ajedrez con todas sus variantes se extendió por todo el mundo fundamentalmente de la mano de los árabes. El ajedrez moderno, tal y como lo conocemos en el mundo occidental, se inventó en nuestro país en los últimos compases de la época medieval. Hoy, en España, miles de personas de todas las edades practican este deporte en clubes adscritos a la Federación Española de Ajedrez y en miles de colegios, centros culturales y otros centros de ocio.
Como siempre, lo importante en educación no es qué se utiliza para conseguir un objetivo, sino si el objetivo se logra o no (siempre que los medios sean legítimos, por supuesto). Así pues, lo esencial de este programa de ajedrez no es que se vaya a utilizar el ajedrez como elemento educativo, sino que van a poderse desarrollar capacidades y competencias que, en los últimos informes Pisa, han arrojado unos resultados muy negativos de nuestra educación elemental. ¿Podría lograrse esto con otros programas como “Petanca en la escuela”, “Oratoria en la escuela” o “Ciencia en la escuela”? Claro que sí. Dependerá de la presión y la fuerza asociativa de los diferentes movimientos, Federaciones y Asociaciones.
Por supuesto, esta proposición no de ley no es vinculante y no se obligará a las Comunidades Autónomas ni a los centros educativos a incorporar el programa, pero en aquellos en los que sí se haga podremos preguntar dentro de unos cuantos años y tratar de evaluar, dentro de las dificultades que tiene la evaluación de los programas educativos, el grado de eficacia de esta iniciativa; iniciativa que, cuanto menos, es innovadora y valiente.
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